Home Office: 10 cosas que aprendí en 10 años de trabajo remoto

En este post te comparto 10 cosas que aprendí en 10 años de Home Office.

El Home Office no nació con el coronavirus, es una tendencia que crece de la mano de Internet y de los trabajos online como diseñadores webs, programadores, traductores, ilustradores, trabajos freelance, etc.

En Argentina sólo el 2% de las empresas usan habitualmente el teletrabajo. Algunas tienen un día de home office a la semana pero ahora con la pandemia del conoravirus esta modalidad se expandió por todo el país como una gran alternativa para quedarse en casa y evitar que se siga propagando el virus.

Yo lo confieso, no sé lo que es ir a una oficina, 8 horas a cumplir horario. Desde antes de recibirme como periodista que ya trabajo desde esta manera, desde cualquier lugar que tenga internet. Desde hace 10 años. Mis oficinas han sido mi departamento, hostels, dptos de Airbnb, bares, hoteles, bibliotecas públicas y hasta centros de jubilados.

Muchos pensarán que está genial pero como todo en la vida, tiene sus pros y contras. Siempre digo que no es para cualquiera (y está buenísimo si creés que es para vos pero siempre que lo puedas elegir!). Deberás saber que tenés que ser muy autosuficiente y organizado.

Como medida de prevención del coronavirus hoy son miles los que están haciendo Home Office en Argentina (y en el mundo) así que se me ocurrió compartirles 10 cosas que aprendí en estos 10 años de Home Office (ojo que muchos consejos me los sigo diciendo eh! ;)

10 cosas que aprendí en 10 años de Home Office

Ponete el despertador como siempre

No tan temprano porque seguro ganás el tiempo de trasladarte pero tampoco te levantes 5 minutos antes de empezar a trabajar.

Vestite

Sí, parece obvio pero no. Sacate el pijama, vestite y peinate. Creéme que si pasás 15 días vestido de la misma manera en la que dormís te vas a deprimir.

Disponé de un espacio para trabajar en tu casa

En este punto las dimensiones espaciales de tu hogar pueden condicionarte pero siempre hay que ser creativos y generar un nuevo espacio o reinventar uno ya existente.
Mi oficina, por ejemplo, es un escritorio con una silla cómoda, material de librería, una lámpara, un modem de wifi, etc pero en el mismo ambiente también está ubicado el living y el comedor.

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Recordá que lo que necesites para trabajar tiene que estar cerca. Levantarte a cada rato para buscar algo puede afectar el rendimiento. No olvides de decorarla a tu gusto! Al final y al cabo vas a pasar horas ahí y tiene que ser de tu agrado.

Definí tus horarios de trabajo y respétalos

Seguí una rutina. Es fundamental auto-organizarse!
Minimizá las distracciones ya que los estímulos de una casa no son los mismos que los de un lugar de trabajo. Es muy fácil distraerse con lo que nos rodea e incluso aprovechar para mezclar tareas hogareñas con las laborales. Vas a ver que hay días que te distraigas con una telaraña y otras veces vas a estar tan productivo/a que no te vas a dar cuenta de la hora.
Un consejo: silenciá las notificaciones del celular o cerrá las pestañas abiertas en internet que puedan distraerte. Lo mismo con las redes sociales, evitalas. (Aunque a veces es difícil porque muchos trabajamos con ellas). Una buena opción es tomarte un tiempo. Hay incluso aplicaciones como Brain Focus que te ayudan a organizarte y por ejemplo trabajás 25 minutos, descansás 5, trabajás otros 25 y descansás otro 5 minutos y así y a la hora de trabajo descansás 15 minutos.

Cortá para comer

Esto no es broma. No almuerces ni meriendes arriba de la compu. Te lo digo y me lo digo. A veces es muy difícil cuando estás siempre solo/a y estás entrenido/a con lo que estás haciendo.
Tomá descansos y alimentate bien (aprovechá que estás en tu casa y podés cocinarte algo más sano que lo que venden en la oficina).

Home Office: Separá lo doméstico de lo laboral

Quizás es lo más difícil pero hacele saber a tu familia y amigos que no estás disponible. Poné límites con las personas que convivís. Si bien estás en casa, no estás de vacaciones y no estás disponible para resolver problemas, hacer compras o lavar la ropa.
Es necesario dejar claro cuál es tu horario de trabajo y que tu trabajo desde casa, es igual como si estuvieras trabajando de manera presencial en tu empresa. Lo mismo pasa cuando tenés que hacer videoconferencias. Necesitás silencio y respeto. Un buen consejo es ponerte auriculares para que se den cuenta.

Organizá tu casa y tu espacio de Home Office

Si tu ambiente de trabajo es tu casa, necesitás tener la seriedad de oficina. Esto es mantenar la casa limpia, las cosas en su lugar y tu escritorio en orden.

Home Office: Establecé límites con tus jefes y clientes

Que los acuerdos estén bien claros desde el principio y se respeten los horarios de entrega y los pedidos. Que estés en tu casa no significa que estés disponible las 24hs.

Terminá tu día laboral de Home Office

Siempre habrá algún pedido (un correo, una solicitud, una propuesta) pero eso no quiere decir que necesitas resolverla inmediatamente. Separá lo que es urgente de lo que no es y desconéctate.

Conservá un espacio para socializar

Organizá almuerzos con amigos, trabajá en espacios de coworking, caminá o salí en bicicleta a la calle. Esto es muy importante porque hay días que si tenés comida en tu heladera pasarás sin ver la luz del sol.
En mi caso, por ejemplo, tengo actividades fijas como bailar afro y tango que son mi cable a tierra. Ahora por el coronavirus están suspendidas pero igual podemos sociabilizar con amigos y hacer videollamadas, por ejemplo, para distender la mente ?

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¿Y vos cómo venís con los días de home office? ¿Te gusta o no? ¡Contame! ?