Recorriendo Circuito Chico, uno de los paseos más tradicionales e imperdibles de Bariloche

En este post te cuento sobre el recorrido por Circuito Chico, uno de los paseos más tradicionales e imperdibles de Bariloche que incluye hermosas vistas panorámicas entre bosques andinos, lagos helados y montañas nevadas.

Haciendo memoria, recordando fechas y viajes, llegué a la cuenta de que esta es la séptima vez que viajo a la ciudad de Bariloche, ubicada en el sur de Argentina. Pero todos esos viajes fueron muy diferentes entre sí ya que es un destino que tiene muchas facetas para descubrir. 

Fui cuando era niña en un viaje en auto en familia haciendo la ruta de los 7 lagos, con el colegio de viaje de egresados (los argentinos tenemos la costumbre de irnos a Bariloche al terminar la secundaria), en la época de la facultad visitando a una amiga barilochense que me hice mientras estudiábamos en la UNLP, en familia otra vez durante unos días de verano y también en una escala de paso yendo para El Bolsón durante un otoño. La última vez fue hace dos años cuando llevé a mi hermanito a conocer la nieve y a viajar en avión por primera vez. Tuve el privilegio entonces de conocerla en verano, en invierno y en otoño. ¡Sólo me faltaba conocerla en primavera!

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Esta vez tuve la suerte de volver a viajar gracias a una oferta que encontré de la aerolínea low cost JetSmart por AR$700 (Cómo no aprovecharla!!). La particularidad de este viaje fue que era sólo por dos días ya que luego seguiría viaje hacia El Bolsón y en primavera, una estación que me encanta y que tenía muchas expectativas ya que, al igual que otoño, es una de mis estaciones preferidas.

Ni bien aterrizó el avión y pude subirme al colectivo 72 que te lleva desde el aeropuerto al centro ya pude sentir por la ventana la primavera barilochense. Las retamas florecidas -un arbusto con flores amarillas- invadían todo el paisaje del costado de la ruta llenándolo de un color tan intenso que parecía otoño.

También, sobre los costados de la ruta, se podían ver arbustos de rosa mosqueta florecidos y varios lupinos de colores  o «chochos» como le dicen los locales. Por sus racimos de flores vistosos y llamativos es una planta que suele usarse para decoración. Las flores emergen de diferentes espigas que tiene la planta y pueden ser de diferentes colores: blancas, violetas, lilas, rosas, amarillas y hasta anaranjadas. ¡Ver cómo se asomaban todos los colores y sus aromas era una belleza!

Sin dudas, recomiendo mucho conocer esta ciudad durante la primavera porque su paisaje florido es muy digno de conocer (cambia mucho el paisaje en las distintas estaciones) y además es temporada media / baja por lo que los precios son más accesibles.

En este viaje tan corto por Bariloche decidimos con mi novio (era su primera vez en la ciudad) hacer el paseo más imperdible, de esos que no pueden faltar en tu visita: el tour por el Circuito Chico. Es una excursión corta, de medio día, recorriendo 65 kms por la margen sur del lago Nahuel Huapi que creéme que te asegura una de las vistas más hermosas del Lago Nahuel Huapi, islas y montañas.

El viernes a las 9 am, los operadores de DayTours4u nos pasaron a buscar en una van por nuestro hospedaje de Airbnb, ubicado en el centro de la ciudad. Fueron muy puntuales y luego de pasar a buscar a otros pasajeros por otros hoteles comenzamos la aventura. Nuestros compañeros de excursión eran catalanes, brasileños, argentinos (salteños y cordobeses) y canadienses mientras que el guía local se llamaba Federico. Mientras íbamos recorriendo la Avenida Bustillo, hacia el oeste de Bariloche, nos iba contando (en español, portugués e inglés) datos e historias de la ciudad.

En esta primera parte del recorrido se aprecia la arquitectura urbana y varias de las casas de los pioneros de Bariloche mientras se va bordeando el lago Nahuel Huapi, el más grande de la región con más de 500 km2 de extensión. La postal que se ve se asemeja a la de los Alpes suizos y en sus tradiciones y costumbres se observa una gran influencia europea de principios del siglo XX: desde el deporte de ski, los chocolates y la cerveza casera, los perros San Bernardo, etc.

Mientras se continúa el recorrido la zona urbana va quedando atrás y comienzan a aparecer los bosques llenos de cipreses, coihues, maitenes y ñires y  entre algunos de los árboles típicos del lugar. También se observa el Cerro Catedral, a lo lejos, con sus picos nevados. Conocimos la Playa Bonita, ubicada frente a la isla Huemul y unos kilómetros más adelante está el balneario Bahía Serena.

Luego de unos kilómetros llegamos al Cerro Campanario en el kilómetro 17, en cuya cumbre a 1050 metros de altura, se encuentra el teleférico donde tenés la opción de llegar en una aerosilla (el valor es de 450$ para los mayores y de $225 para los menores). Para los que no quieran pagar la aerosilla, pueden subir también caminando pero ascender desde la base a la cima en aerosilla es otra atracción en sí misma.

Federico sacó los tickets para todo el grupo y luego subimos en la aerosilla de a dos. La aerosilla es muy segura y realiza el ascenso en aproximadamente unos 7 minutos mientras se disfruta de los árboles que hay debajo como el pehuén, el coihue  o la araucaria (están señalizados con carteles informativos que explican de qué árbol se trata) y de toda la belleza del paisaje.

Para subir al Cerro Campanario nos abrigamos bien y preparamos para el frío ya que ya nos habían advertido que noviembre es el mes del viento en Bariloche así que imagínense el viento que había en la cima, casi nos volábamos. Pero el paisaje que descubrís en la cumbre vale la pena!!!! Desde aquí obtendrás una de las vistas más impactantes del Parque Nacional Nahuel Huapi. Es un mirador increíble que te ayudará a comprender la inmensidad del paisaje patagónico con sus lagos, bosques y montañas.

https://www.instagram.com/p/B5d7ZZCnoIW

A través de los carteles informativos que hay en la cima podrás reconocer y descubrir todos los atractivos naturales que tenés en frente, como la Isla Victoria, la Península San Pedro, el Lago Nahuel Huapi y el Moreno, la laguna El Trébol y los diversos cerros como el Llao Llao, Fundadores, Tres Picos, Colorados, López, Catedral, etc. ¡Una vista de 360 grados alucinante! (Para mí gusto es el mirador con las mejores vistas de la ciudad de Bariloche).

Luego de un tiempo suficiente para sacar fotos o tomar un chocolate caliente en la cafetería (no es giratoria como la del Cerro Otto pero está vidriada y tiene unas hermosas vistas) llegó el turno del descenso de la aerosilla, también muy divertido y con vistas aún más lindas que las de la subida ;)

Luego seguimos viaje por el Circuito Chico hasta llegar a la segunda parada. El famoso «Punto Panorámico» que es una de las paradas obligatorias de este circuito. Es LA foto de Bariloche.

https://www.instagram.com/p/B5d8fQtn_sm

Se trata de un mirador sobre la ruta que ofrece un panorama imponente del lago Nahuel Huapi, la cordillera de los Andes, la Isla Victoria y el lago Moreno, el segundo lago más grande de la zona donde se realizan diversas actividades acuáticas como pesca de trucha arcoiris y navegación. Justo enfrente se encuentra el pintoresco hotel Llao Llao y más allá varias islas e islotes.

Luego de un tiempo para apreciar el paisaje y sacar fotos, seguimos en la combi por Arturo Frondizi, cruzamos el arroyo López para llegar al Hotel Llao Llao. En el camino pasamos por bosques de arrayanes y cruzamos el Puente Angostura donde el lago Moreno se une con el Nahuel Huapi. Federico nos contó que en esta zona es donde más viento hay (se forma como un túnel en el paisaje) y nos explicó que «llao llao» significa hongo rico y sabroso en mapuche (pueblos originarios de la zona).

El famoso hotel Llao Llao se inauguró en 1939 y marcó un hito importante en el desarrollo turístico de Bariloche. Es el hotel más exclusivo de Argentina con más de 200 habitaciones, helipuerto, restaurante, centro de convenciones, campo de golf con 18 hoyos, etc. Las habitaciones cuestan entre 350 y 3000 dólares. Una buena opción para visitarlo (me contaron) es tomar el té en el Winter Garden que ofrece un buffet lleno de cosas ricas para merendar.

 El hotel además está rodeado de un imponente marco natural, el parque municipal Llao Llao, donde se pueden realizar tranquilas caminatas por el bosque. Brinda una de las postales más conocidas de Bariloche.

https://www.instagram.com/p/B5d-S6BnJ1l

También recorrimos la Capilla San Eduardo, construida en la misma época que el hotel en un estilo montañés con características neogóticas y evidentes influencias de arquitectura europea que se integra perfectamente en la naturaleza de su alrededor. Está  hecha de madera de ciprés y piedras y se puede visitar por dentro.

Por último, conocimos Puerto Pañuelo que es el punto de partida desde donde salen las embarcaciones para los tours lacustres como el del Bosque de Arrayanes e Isla Victoria y Puerto Blest. Algunos pasajeros se quedaron aquí para realizar esa excursión mientras nosotros volvimos al mediodía a nuestro hospedaje en el centro de Bariloche luego de haber pasado una hermosa mañana!

Sin dudas es una de las excursiones obligadas para hacer en un primer paseo por Bariloche ya que te permite conocer los lugares más representativos del paisaje cordillerano en medio día!

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